¿Cómo cura el corazón el tiempo?
Sí, me costó encontrar seguridad. Había días en los que lo veía todo negro y había tocado fondo. El perfeccionismo había calado tan hondo y penetrado tanto en mi personalidad que yo ya no disfrutaba del día, sino que lo veía como un duro desafío.
Y ahora mis días siguen siendo desafíos, porque así es como los quiero encarar. Como oportunidades para superarme a mí misma. La diferencia es que ese 'desafío' ahora está teñido de los más hermosos colores y de la más pura esperanza.
'Esperanza' porque ya no espero a nadie que venga a salvarme, ya no necesito la compañía de nadie, solo la mía, la de Dios y mis seres queridos. Porque estoy encontrando una fuerza interna, que va a ser la que me salve. La confianza que tenía en los demás y las expectivas que los demás tenían sobre mí las deposité en una batidora que transformó lo anterior en confianza en mí misma y mis propias expectativas.
Y tampoco espero nada de nadie, porque entendí que así como las personas te quieren, te dejan de querer o simplemente se alejan. Porque así es la vida. Cambia cada día.
¿Cómo hice el 'click'? Porque me di cuenta de que yo creé mi mundo de colores. No necesité de nadie que lo construyera por mí. Y para vos que estás leyendo esto, quiero que sepas que es un proceso. Nada pasa de un día para el otro. Pero cuando realmente te encontrás con ese sentimiento de libertad interior, te vas a sentir tan completo instantáneamente, que no va a haber desafío que no quieras conquistar.
No comments:
Post a Comment