Joven, hermosa princesa

Aquella mágica noche

"Prefiero hacer las cosas por mí misma y ser totalmente independiente". -Mujercitas, Louisa May Alcott

  Entrada la noche, habían bajado las luces del salón y los chicos y las chicas bailaban y cantaban a todo pulmón. Contenta, ella salió al patio a respirar el aire con perfume a jazmín de aquella particular fecha de octubre; alzó los ojos al cielo y se regocijó al contemplar la luna y las estrellas, más luminosas que nunca. Una suave brisa le recorrió el cuerpo e hizo que se estremeciera. Los pliegues de su vestido celeste se agitaban con su movimiento y a cada paso que daba, desprendía brillos y encanto. Descansando la espalda contra una pared, volvió la mirada en torno suyo. Tanta gente conocida que, dentro de unos meses, solo sería parte de sus recuerdos. De un instante a otro, toda esa nostalgia de algún remoto tiempo se transformó en plenitud, porque en aquel momento su corazón se sintió rebosante de amor y en completa alegría. Nada le faltaba. Nada terminaba definitivamente. Ella entendió que hacia donde fuera que se dirigiera, no extrañaría nada demasiado, porque lo más importante ya lo llevaba dentro suyo. A sus personas favoritas las encontraría siempre en aquel lugar especial de su alma, y ellas la acompañarían y guiarían por todos los indescifrables caminos. Y, además, en cualquier circunstancia, contaría con aquello que mantenía en su interior, aguardando a ser descubierto; y que aún sin haber sido revelado, la dotaba de las más adorables sutilezas y resaltaba sus delicadezas de espíritu. Así, por descubrirse a sí misma al menos un poco, pudo reconocer su valor y no solo aceptar su unicidad, sino también amar a los demás, sin prejuicios de por medio. Solo reconociendo la importancia de la autenticidad y pudiendo ser ella misma desestimando absurdos estereotipos.

-Valen🌼