Un patio de estrellas

 Días de fiesta 

“Necesito un camarada, Margaret; cuando en éxito me llene de alegría, nadie la compartirá conmigo y nadie me animará, tampoco, cuando me embargue el desaliento. Podré confiar mis sentimientos al papel, pero este es confidente muy pobre para comunicarle lo que experimentamos. Necesito la amistad de un hombre que tenga afinidad conmigo; un hombre cuya mirada pueda responder a la mía. Pensarás, sin duda, que soy un romántico, querida hermana, pero me afecta sinceramente esta ausencia. No tengo conmigo a nadie que sea al mismo tiempo amable y valeroso, comprensivo y culto; a nadie cuyos gustos se parezcan a los míos y que pueda aprobar mis proyectos o ayudarme a modificarlos”. –Frankenstein, Mary Shelley

Crucé el patio y vi que salió un poco de luna. Pensé que algunas noches merecían prolongarse eternamente, que eran dignas de resurgir en el recuerdo una y otra vez. Cuando estaba mirando el cielo, volteé y a menos de un metro estaba él; también entrando al patio, alzó la vista al cielo. Aunque vestido de azul, quizás no era un príncipe; no obstante me permití creer que sí. Nuestras miradas se encontraron durante un instante y luego se volvió por donde había venido, pero fue suficiente para coronar mi alegría de ser princesa. 

–Valen🌼