SI PUDIERAS REINICIAR TU VIDA,
¿LO HARÍAS?
"Cuando uno extraña un lugar, lo que realmente extraña es la época que corresponde a ese lugar; no se extrañan los sitios, sino los tiempos". -Jorge Luis Borges
RECUERDOS
No puedo hacer menos que coincidir con el maestro Borges.
Me gustaría agregar que junto con los tiempos se extraña también a las personas que compartieron esa época con nosotros. Por eso es tan difícil aceptar que todo terminó: porque cuando las historias terminan, los recuerdos se pierden en la variabilidad del tiempo.
La melancolía por lo que se fue y no volverá es frecuentemente vista como un obstáculo que no nos permite seguir, una cadena que nos ata al pasado, impidiéndonos disfrutar del presente; pero poco se habla de cómo la nostalgia descubre nuestras honestas intenciones y amor puro y fiel con quienes fueron y SON todo para nosotros, aunque físicamente ya no estén.
Así como la vida está llena de primeras veces que nos envuelven en nubes de esperanza, fantasía y amor, también hay últimas veces que traen vientos de reflexión, dolor y vacío.
Lo que pasa es que la melancolía muchas veces está sujeta al deseo de ser feliz como lo fuimos en el pasado, pero eso es imposible. Las circunstancias que se dieron, tanto las personas que estuvieron como el tiempo que fue, fueron únicas. Por eso es inútil intentar replicar la felicidad de aquellos tiempos.
Yo creo que el secreto está en buscar la verdad en los más sinceros momentos vividos, y guardarla en lo más profundo de nuestra alma, para que sea una brújula que nos guíe y nos llene de fuerza para vivir cada desafío; esa verdad nos dará la seguridad que necesitamos para cerrar etapas y construir una nueva felicidad.
Solía creer que esa melancolía era el remedio que a la larga curaría el vacío, ahora me doy cuenta de que, así como el conformismo no es más que inseguridad disfrazada de amigo, el valor de seguir adelante nace de la certeza de haber vivido rodeada de amor.
A partir de ahora, buscaré la verdad en las alegres tardes de verano, en las frías mañanas antes de ir al colegio, en los momentos de duda, cuando no sepa qué camino seguir y en cada instante de mi vida. Porque entendí que el amor nos da fuerzas para continuar. Porque gracias al amor VIVIMOS y superamos cada adversidad.